Estadísticas globales sobre el acoso escolar en niños con trastorno del espectro autista
Médico Pediatra Puericultor. Nutriólogo Infantil. Investigador independiente.
Revisión elaborada por el autor.

Introducción
Los datos internacionales revelan una realidad preocupante: los niños y adolescentes con Trastorno del Espectro Autista (TEA) experimentan tasas significativamente más altas de acoso escolar que sus pares neurotípicos. La evidencia científica demuestra que esta población es particularmente vulnerable, con prevalencias que oscilan entre el 12 % y el 77%, según distintos estudios y metodologías. Además, existe un fenómeno de infraidentificación (identificación deficiente): un tercio de los estudiantes con TEA no reconoce cuándo está siendo acosado. Esta situación se ve agravada por factores como las dificultades comunicativas propias del trastorno, la falta de adaptación de los protocolos escolares y la carencia de programas de prevención específicos.
1. Prevalencia del acoso escolar en población con TEA
La investigación científica ha establecido que los estudiantes con TEA presentan un riesgo considerablemente mayor de sufrir acoso escolar en comparación con l a población general. Un metaanálisis encontró una prevalencia agrupada del 44 % de victimización en individuos autistas [1], lo que confirma la magnitud del problema y la urgencia de una respuesta coordinada.
En España, el estudio “Situación del alumnado con trastorno del espectro del autismo” reveló que un 12 % del alumnado con TEA ha sufrido al menos una situación de acoso escolar, y un 6,5 % ha experimentado más de una [2]. Lo más alarmante es que el 33,5 % de estos estudiantes no sabe identificar si está siendo víctima de acoso, fenómeno especialmente marcado entre las chicas con autismo.
En Canadá, un estudio encontró que hasta el 77 % de los niños con TEA reportaron haber sufrido acoso escolar [3]. Esta variabilidad entre países puede explicarse por diferencias metodológicas, culturales y educativas. Algunas investigaciones indican que el alumnado con TEA tiene entre dos y cuatro veces más riesgo de ser víctima de acoso, simplemente por tener una discapacidad y ser percibido como “diferente” [2]. De forma aún más alarmante, Naylor y colaboradores hallaron que el riesgo puede ser hasta siete veces mayor [4].
2. Patrones de victimización según edad y entorno educativo
Los estudios muestran que el acoso escolar se incrementa al finalizar la educación primaria y durante la secundaria [2], coincidiendo con el aumento de las demandas sociales y la complejidad de las relaciones interpersonales. Un estudio reciente confirmó que los adolescentes autistas son más propensos a ser acosados en secundaria que en primaria [3].
3. Tipología del acoso escolar en TEA
El acoso hacia estudiantes con TEA se manifiesta en distintas formas, con una predominancia clara de la exclusión social. Ésta afecta al 32 % de los varones y al 37 % de las hembras con autismo [2], reflejando cómo las dificultades socio-comunicativas derivan en aislamiento por parte de los pares.
Un metaanálisis reveló prevalencias del 33 % para acoso físico, 50 % verbal y 31 % relacional [5], siendo el acoso verbal la forma más frecuente. Además, estudios identifican tasas del 47 % para acoso escolar tradicional, 16 % para abuso infantil, 40 % para victimización sexual, 13 % para ciberacoso y un alarmante 84 % para formas múltiples de victimización [1].
4. Factores de vulnerabilidad y riesgo
El autismo se considera uno de los principales factores de riesgo entre los trastornos del
neurodesarrollo [3], debido a:
- Dificultades sociales y comunicativas que impiden establecer amistades, un factor protector clave [6].
- Conductas estereotipadas y problemas conductuales que pueden generar burla o rechazo [6].
- Reacciones retraídas o desproporcionadas ante el acoso, que perpetúan la victimización [6].
- Síntomas internalizantes, comorbilidad con TDAH y aumento de las demandas sociales con la edad [6].
De hecho, el 35 % de los escolares con TDAH en primaria reportan acoso, exclusión o aislamiento social, con cifras aún más elevadas en los casos de TDAH tipo combinado [7].
5. Diferencias de género en la victimización
Aunque la mayoría de los estudiantes con TEA son varones (83 % en el sistema educativo español no universitario) [8], se ha identificado que las hembras presentan mayores dificultades para reconocer el acoso, lo que puede llevar a una infranotificación [2].
Por ejemplo, en un estudio con 26 personas autistas víctimas de acoso, solo 2 eran chicas con TEA nivel 1 (síndrome de Asperger) [4]. Sin embargo, laexclusión social afecta en mayor proporción a las chicas (37 %) que a los chicos (32 %) [2].
6. Respuestas institucionales y su efectividad
Solo el 40 % de las familias considera útiles las medidas escolares frente al acoso [2], lo que refleja una brecha entre las necesidades del alumnado con TEA y las estrategias de intervención actuales.
Aunque ha habido avances en la inclusión educativa, el número de estudiantes con TEA en España casi se cuadruplicó entre 2011 y 2021 [8], la integración no siempre ha ido acompañada de recursos adecuados.
Se recomienda adaptar herramientas de detección de acoso a las necesidades del alumnado con TEA, promover buenas prácticas, y desarrollar programas de convivencia que contemplen la neurodiversidad.
Conclusión: hacia entornos educativos más seguros e inclusivos
Las cifras globales confirman que el acoso escolar en estudiantes con TEA es una problemática estructural. La victimización puede ser entre dos y siete veces más frecuente que en otros estudiantes, con múltiples formas de agresión coexistiendo en muchos casos. La dificultad para identificar el acoso, sumada a la falta de protocolos específicos, exige una transformación profunda de los entornos escolares. Es urgente implementar estrategias que atiendan las particularidades del TEA, con foco en la prevención, la inclusión y la formación docente.
Solo mediante una colaboración efectiva entre familias, docentes, investigadores y responsables políticos será posible garantizar el derecho de todos los niños, independientemente de su neurodiversidad, a una educación segura, respetuosa y verdaderamente inclusiva.
Referencias
- https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC10486169/
- https://autismo.org.es/actualidad/noticias/el-335-por-ciento-del-alumnado-con-autism o-no-sabe-identificar-si-es-victima-de-acoso-escolar/
- https://www.unsw.edu.au/newsroom/news/2022/06/kids-on-the-autism-spectrum-experience-more-bullying
- http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-516220190003000555
- https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26451871/
- https://oes.fundacion-sm.org/eduforics/educacion-inclusiva-y-de-calidad/atencion-diversidad/acoso-escolar-y-autismo-construyendo-entornos-inclusivos/
- https://diaridigital.urv.cat/es/acoso-escolar-autismo/
- https://www.funcas.es/prensa/el-numero-de-estudiantes-con-diagnostico-de-trastorno-del-espectro-del-autismo-se-cuadruplica-en-una-decada/